viernes, 5 de septiembre de 2008

Preocupaciones sobre la educación

Estos días asisto a una apasionante conversación en la blogosfera más cercara, sobre el declive de la formación y la crisis del sistema educativo español.

Algunos de los que de vez en cuando os pasáis por aquí, lo vivís muy de cerca, así que voy a intentar recoger las reflexiones de otros, calmar mi propio pensamiento, y seguir tejiendo la red con aquellos que queráis seguir la conversación.

El hilo empieza en el Café de Ocata, donde Gregorio Luri, nos muestra un artículo de Magisnet con la gráfica del “Fracaso escolar en 2006”. Una de las frases más lapidarias del informe es aquella que nos alerta de que si no invertimos la tendencia, “dejamos en riesgo de quiebra social a cerca de la tercera parte de nuestros jóvenes, riesgo que mantendrán hasta que tengan edad de jubilarse”.

Luri, valora la situación como de “emergencia nacional”, y no es para menos, sobretodo después de darnos cuenta de que un crecimiento económico basado actividades de baja cualificación y valor añadido, nos deja expuestos y a merced de los espasmos cíclicos de la macroeconomía. “El ladrillo nos ha llenado los bolsillos y nos ha vaciado bastante nuestras cabezas” nos dice Antoni Gutierrez Rubí. 

En “los sueños de la razón” Miguel, que tiene tanto que decir que no dice nada, alienta el debate sobre “La magnitud de la tragedia”. 

Nos hemos relajado. El hambre agudiza el ingenio, y llevamos muchos años idiotizados por un ciclo económico expansivo, que ha relajado a los individuos, a la sociedad y a los gobiernos.

Por las leyes más fundamentales de la evolución, tenemos tendencia a adaptarnos al entorno y a equilibrar nuestra inversión de energía en función del riesgo y del beneficio esperado. Si estoy seguro de poder encontrar un trabajo (y además, mi nivel adquisitivo no va a estar directamente relacionado con mi capacitación intelectual), reoriento mi esfuerzo y mi atención…que alternativas estimulantes no faltan, nos comenta Julen en su post “Educación en tiempos de cólera

Pero, por qué no se toman medidas serias, estructurales, largoplacistas, sostenibles, para detener esta tendencia que a nadie sorprende?. Es incapacidad legislativa? Es devaluación intencionada de la capacidad crítica de los ciudadanos?.

Este verano me he leído “1984” de George Orwell, así que se me ponen los pelos de punta al leer a Manuederra denunciando que el sistema promueve la mediocridad y desmotiva (aísla?) a los brillantes.

Vamos hacia una sociedad deliberadamente diseñada, de individuos sin recursos para la crítica, la diferenciación, el pensamiento y la responsabilidad?. Bastará luego un poco (o mucho) de anestesia consumista, informativa y lúdica, para dominar a ejércitos de borregos manipulables?. “La ignorancia es la fuerza” -Teoría y práctica del colectivismo oligárquico, 1984-

Yoriento se pregunta por la calidad del profesorado “¿son los mejores profesionales de la sociedad los que se dedican a educar?”.  Por que si yo algo recuerdo de la escuela era mi admiración por los profesores. Su capacidad natural de convertirse en referentes.

El modelo finlandés, paradigma de la calidad didáctica, basa el éxito de su modelo en el rol del profesor, motivado y entrenado para convertirse en la palanca de desarrollo de las nuevas generaciones. Sí, los mejores deberían estar al frente.

Y lo más preocupante, en mi opinión, no es la variable económica del drama, sino la dimensión antropológica, el “proceso biosocial de la existencia de la raza humana” (me encanta esta frase from Wikipedia) . Las competencias del ser humano para llevar a cuestas su propia evolución, estoy de acuerdo con Senior Manager, no pueden depender sólo de las instituciones académicas, dependen también de los círculos y las influencias más íntimas (la familia, por poner sólo un ejemplo ;-).

Esos chicos hoy estudiantes, se van a enfrentar a un mundo mucho más complejo del que nos hemos encontrado nosotros y en sus manos van a tener una responsabilidad crucial para afrontar los grandes retos de la humanidad.

Les (nos) debemos algo más, no?

12 comentarios:

Senior Manager dijo...

Hola Odilas, excelente resumen del brainstorming que surgió de forma indirecta en nuestra comunidad bloguera...

Ya había dicho en alguna oportunidad... Que estamos perdiendo el Norte en la educación que reciben los menores en España… tenemos un obstáculo cultural que frena las mejores iniciativas en este sentido…

No obstante y según mi opinión… este obstáculo lo podemos convertir en oportunidad, siempre que todos nosotros en conjunto: El estado, la sociedad civil, las empresas y los poderes públicos nos demos cuenta de que nuestro sistema educativo actual está desfasado y atrasado…

Estamos educando civil y académicamente mal a nuestros menores… Por otro lado, la legislación vigente en la materia presenta un retraso de unos 40 años, por lo que no está adaptada a la realidad que nos envuelve…

Lo peor, es que ésta realidad está durando muy poco y dentro de una década España ya mostrará síntomas de ser un país mal preparado académicamente y muy diferente del que ahora conocemos…

La oportunidad se presenta ahora porque justo tenemos (espero que la crisis no nos la arrebate) la capacidad económica y política necesaria para llevar a cabo estos cambios sin muchos traumas y porque las generaciones intermedias no han sido particularmente afectadas…

Pero...Si los cambios no son propuestos y hechos efectivos antes de que acabe esta década, puede que sea demasiado tarde.

Este tema me preocupa más que otros pues me afecta directamente, ya que cada vez que se incorpora un joven a la empresa en la que trabajo, me encuentro que la realidad es más palpable de lo que esperaba y más cruda y oscura de lo que creía.

Slds
SM

Antoni dijo...

Hola!
Muchas gracias por la referencia.
Seguimos, nos leemos.
Un abrazo desladrillado

Julen Iturbe-Ormaetxe dijo...

En cualquier caso, también hay mucho profe y profa preocupados por sus alumnos. Una cosas son los sistemas y otra cosa la forma en que se aplican, donde se llega al contacto "cuerpo a cuerpo". Y ahí siempre hay profesionales que a veces generan suficiente nivel de relación con sus alumnos como para pensar que no todo es un desierto.
Saludos.

Odilas dijo...

Sí Julen, afortunadamente siempre se puede decir aquello de: ...y luego están las personas

Gracias a ti, Antoni, por tus Palabras.

Senior, qué te parece el horizonte 2015? : http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Garmendia/anuncia/estrategia/excelencia/universidades/espanolas/elpepusoc/20080905elpepusoc_7/Tes

Senior Manager dijo...

Hola Odilas...
Me parece fantástico, pero fíjate que sólo hace énfasis en los estudios universitarios y állí hay problemas sólo porque se vienen arrastrando desde más abajo. Aquí lo que hay que hacer es un marco legal que cambie nuestra cultura y que oriente todos los esfuerzos hacia la educación de los niños y adolescentes en todos los sentidos...
Have a nice wknd!!!
SM

MarcG dijo...

Hola Odilas,

Aunque sólo sea por esta vez, me gustaría que estuvieras equivocada, el futuro que pintas no es muy alentador...

La verdad es que este tema me preocupa, sin ir más lejos, mi hija mayor empieza el 'cole' el próximo lunes.

Creo que el problema no está en los profesores (que probablemente se podrían mejorar), ni tampoco en los contenidos que se enseñan (que también probablemente se podrían mejorar), ni en la inversión que se hace en educación (mejorable...).

A mi entender la raíz del problema está en la sociedad, en la ausencia de valores básicos cómo por ejemplo la cultura del esfuerzo o la cultura del respeto.

Tengo una amiga que es profesora de secundaria, me comenta que la impotencia es una sensación habitual en los profesores...

Por otro lado, mi mujer trabaja en la universidad, me comenta que los alumnos cada vez llegan peor preparados. No estoy hablando de formación específica sino de temas fundamentales (saber escribir decentemente, leer con fluidez, ...).

Es evidente que hay 'algo' que no funciona...

Y yo, en mi absoluta ignorancia en este tema, me pregunto: ¿Por qué motivo no se soluciona este tema?, ¿es por su complejidad?, ¿o es que se está menos valorando su importancia?

Un saludo... y ¡ánimos!.

Odilas dijo...

Hola MArcG, es fácil que esté equivocada ;-), no soy una experta en el tema. Miro alrededor y, quizás con más ignorancia que criterio, me preocupo.

Sobretodo por lo que comentas de falta de habilidades fundamentales como escribir, leer, HABLAR!. La riqueza del lenguaje y la del pensamiento están ligadas. Si no dispones de las palabras para articular una idea, para compartirla con otros, esa idea morirá o se simplificará tanto como tu capacidad de darle forma con el lenguaje.

Perdón, me vuelvo a poner trágica. No sé.., como decía Julen antes, al final, detrás de todo sistema hay personas: profesores, padres, gestores, que pueden tomar (y seguro que muchos lo hacen) conciencia y decisiones.

Hay cambios cuando se genera suficiente energía (individual y colectiva) para provocarlos. Y de alguna forma, estamos contribuyendo a esa energía, con estas preocupaciones y estas palabras compartidas, no crees?

Nicolás dijo...

Interesante y ambicioso debate el que mantenéis. Como reconocemos que todas las opiniones suman y que difícilmente alguna recoge las esencias del debate, me atrevo con la mía.
Supongo que podríamos partir del consenso de que la formación escolar persigue formar personas competentes, respetuosas y éticas. Supongo, también, que esta formación debe estar en consonancia con las exigencias del modelo social imperante, aunque sin olvidar que la escuela siempre ha viajado con cierto retraso respecto a los cambios sociales, a pesar de que algunas veces los haya propiciado. Para ello, las metodologías docentes deben garantizar la eficacia de los objetivos. Ocurre que los cambios en nuestra sociedad son cada vez más vertiginosos y conllevan adaptaciones para las que no disponemos de las condiciones adecuadas: Me refiero a concienciación institucional, formación docente y recursos. En estos momentos estamos aplicando con mucha honestidad métodos de trabajo y concepciones del aprendizaje propios de 5 o 6 decadas anteriores, lo que en términos relativos supone la prehistoria pedagógica. Cuando deje de priorizarse como esencial la mera transmisión de conocimientos, entendida como... el profesor sabe, transmite y evalúa el conocimiento a unos alumnos dispuestos para memorizarlo y almacenarlo, y demos el valor que se merece a la formación en competencias, dentro de un espíritu de diversidad de inteligencias y mentes y con métodos que introduzcan desde las habilidades sociales hasta el territorio emocional, junto al indispensable soporte tecnológico, seguiremos perdidos entre brumas y, probablemente, sufriendo.

MarcG dijo...

Nicolás,

Quizá deberíamos pensar más en lo que un compañero de carrera me comentó un día:
"Esencialmente aquí en la Facultad no te enseñan contenidos sino que te formatean el cerebro para que éste sea capaz de asimilar nuevos contenidos en cualquier etapa de la vida".

Yo soy informático, esto me lo comentó un compañero de carrera después de discutir sobre lo rápido que evolucionaba la informática en contraposición con el ritmo de actualización de los planes de estudio.

Desde luego el concepto 'formatear' es en un sentido positivo no en un sentido de doctrinaje.

Odilas: La verdad es que sí que me gustaría pensar que estamos contribuyendo a esta energía de la que hablas, la energía suficiente para poder provocar cambios hacia un mejor horizonte en la educación en este país (no sólo de los niños, sinó de toda la sociedad, contínuamente deberíamos estar formándonos, o como mínimo yo lo pienso así).

Odilas dijo...

Gracias por la aportación Nicolás, estoy segura de que profesionales como tú sabrán conducirnos entre las brumas...aunque sea sufriendo ;-)

Marcg, reformatear el cerebro? ya nos lo explicarás mejor, que así suena peligroso. Supongo que te/se refiere a no anclarnos en aprendizajes obsoletos que nos impidan evolucionar.

MarcG dijo...

Cuando hablo de formatear el cerebro, (ya sabía yo que esta palabra conlleva polémica), me estoy refiriendo a preparar, realizar los cambios necesarios para que los alumnos, la gente en general, sea capaz de asimilar nuevos conceptos en cualquier momento, no sólo en la época tradicional de aprendizaje, cuando uno es niño/joven.

La idea es acostumbrar a tu cerebro a estar contínuamente aprendiendo, sólo así podremos sobrevivir (y ser productivos) en una sociedad tan cambiante (no sólo en conocimientos sinó en actitudes, tradiciones y, en general, en la vida social).

El viejo esquema es primera etapa: aprender, segunda etapa: aplicar los conocimientos en el trabajo.

Creo que este esquema ha quedado desfasado, ahora hay que estar aprendiendo siempre, por este motivo hay que tener una mente abierta y preparada para recibir y asimilar conocimientos nuevos. Como informático que soy, yo hablo de una mente formateada para ese fín.

Odilas dijo...

Cristalino.