sábado, 31 de diciembre de 2011

Cierre de año

Es difícil resumir un año como el que acaba. No sé lo que nos espera, ni personalmente ni colectivamente, pero hace meses que tengo una sensación de aceleración, de sucesión desbocada de acontecimientos, de cambios, de dificultades, de oportunidades, de experiencias. Supongo que forma parte de la época que nos ha tocado vivir y de una, espero que duradera, facilidad para meterme en líos, que a veces salen bien y otras, pues sirven para ese aprendizaje que es la vida.


Tercer año que trabajo por mi cuenta, y confirmanda aquella sensación de que mientras el cuerpo aguante, es la opción más satisfactoria de todas las posibles. Con sus riesgos y su inestabilidad, pero que no cambiaria por la supuesta estabilidad de ataño.


Una de las cosas más bonitas de este año fue la materialización de The Project

Desde el inicio trabajé con ese esquema de organización red que se organiza por proyectos, pero había que ir más allá de la filosofía, tener un espacio propio y colectivo, explicitar el modelo (que sigue definiéndose y reinventándose), ganar visibilidad, atraer y compartir proyectos, personas y conocimiento, tener una marca común al servicio de cada una de esas personas (y no al revés), pero que sirviera también como un faro para el que quiera encontrarnos y colaborar con nosotros. Salir a escena, arriesgar, exponerse, a ver si esto es una pájara utópica, o realmente resulta útil y atractivo para otras.


Montamos una web (con la ayuda de Metadrop y Somosene) que recogiera los proyectos, los laboratorios, la gente, la información que manejamos. Los de Inquiets nos prepararon un video guay y para empezar con ánimo, montamos una fiesta . (fotos de Xavi Vila, que se ha convertido en el reportero oficial de THP :).

El resto, ha sido trabajar como locos. Entendenme, no es que nos hayan caído proyectos como locos (decir eso, además de incierto, sería una frivolidad, teniendo en cuenta la que está cayendo), es que a mi alrededor he visto y aprendido como la crisis que vivimos, tiene muchas aristas y también supone una tremenda oportunidad de crear, inventar, aprender, compartir y trabajar intensamente.

No soy de consejos, pero creo que no hay otra forma de capear el temporal: casi todo lo que conocemos se desploma, sólo nos queda pasión y humidad por y para aprender, crear redes de intercambio, y proponer proyectos de verdad, no aquellos con los que esperas ganar dinero, si no aquellos que sinceramente crees que aportan algo a una sociedad que está cambiando (demasiado?) rápidamente.


Este ha sido el año en el que ha nacido Social Diabetes . Vamos recopilando la info del proyecto aquí .
Un sistema de autogestión de la enfermedad que gracias a una app para smartphone te permite ajustar la pauta de insulina en función de lo que comes, en lugar de comer en función de la pauta fija e invariable de insulina que tienes asignada. Un sistema colectivo de agregación de alimentos a un BD común, hace que el sistema, que va aprendiendo del comportamiento del paciente, se nutra de la información que pueden compartir diabéticos de todo el mundo. Ricard Espelt y Gemma Urgell nos montaron uno de sus videos
"Talking About"

Social Diabetes, amb Víctor Bautista i Dídac Mauricio from redall on Vimeo.

También hemos puesto en marcha ProjectLinkr un Espacio de trabajo en red para freelance que pretende ser un lugar de encuentro entre profesionales y proyectos. Ayer, en una cena oí a Francesca Cañas decir, “no hay un problema de falta de trabajo, hay un problema de desajuste entre la oferta y la demanda”. Ella hablaba, y estoy de acuerdo, en que hay oferta, pero también mucha demanda sin atender. Hablaba de cómo el sistema educativo tiene que rediseñar el CV profesional pero tenemos también un problema de intermediación: profesionales que buscan proyectos, empresas que buscan profesionales y que no se encuentran o no se fían de lo que encuentran. Posiblemente uno de los grandes cambios sociales que veremos y vemos ya, tienen que ver con nuevas formas de organizar el “empleo”, nuevas formas de encontrar y organizar talento para realizar trabajos y proyectos.




No quiero extenderme mucho, si os interesan los proyectos que hemos ido realizando durante el año, lo vamos publicando todo por aquí.


Dos grandes citas, han sido:

Hasta aquí una crónica más de un año más. Satisfecha, agradecida y con ganas de seguir.

Gracias a todas por pasaros por aquí y como me decía un colega hoy "No dejes que la crisis te jorobe el Fin de Año!!!"

Buena suerte y Feliz año!

martes, 27 de diciembre de 2011

Cops DaVinci

Durante este año que termina una de las actividades que más proyectos ha generado ha sido la implantación de modelos de trabajo colaborativo en organizaciones.

Matizar las estructuras tradicionales caracterizadas por modelos jerárquicos, departamentales, con una división del trabajo que dificultan la transversalidad en la gestión del conocimiento y la generación de redes de intercambio y soporte, empieza a ser una propuesta interesante para organizaciones en procesos de cambio.


Uno de esos proyectos es el que nos ha llevado –entre otras cosas- de nuevo a Santiago de Chile. Allí Aguas Andinas está en uno de esos procesos que transformará la genética de la compañía, que avanza hacia un modelo donde las personas, el conocimiento y la innovación sean el centro de la actividad productiva.


Hace ya más de un año, se activó allí un programa de cambio llamado DaVinci, se definieron unas líneas estratégicas y otras facilitadoras de las primeras. A partir de esa parrilla, se constituyeron varios grupos de trabajo que tenían la misión de convertir en realidad algunas de las iniciativas surgidas del plan.
El encargo ahora era Fortalecer el proceso de Gestión del cambio en el Grupo Aguas, a través de la constitución de equipos de iniciativas estratégicas y facilitadoras DaVinci, a través de un programa de Comunidades de Práctica.

Durante este mes de diciembre, hemos recogido el trabajo de esos grupos, analizado sus dinámicas y activado un proceso para convertirlos en Comunidades de Práctica. Algunas de ellas surgieron, de forma adicional y espontánea de los grupos de debate que se dieron en el marco del programa de formación MANAGING XXI que impartimos en agosto.
Finalmente, se han activado 17 Comunidades de práctica, algunas con un historial intenso de actividad previa, otras de nueva creación.

Los trabajos se han concretado en los siguientes pasos:
  1. Revisión de los grupos de trabajo existentes (razón de ser, actividades previas, resultados, necesidades, organización interna…)
  2. Formación metodológica en los modelos de trabajo colaborativo basados en Comunidades de Práctica
  3. Dotación de un espacio virtual para el trabajo de los grupos
  4. Dos jornadas de Kickoff (una con responsables de los grupos y otras con todos los participantes)
  5. Revisión del modelo de gobierno del programa

La experiencia ha sido muy positiva, y como siempre, una oportunidad de aprendizaje para seguir investigando en este escurridizo mundo de la organización de personas que persiguen objetivos (supuestamente) comunes.

Algunas reflexiones que pueden ser de utilidad en casos parecidos:


Revisión de los grupos

Es importante aproximarse con humildad a estos procesos. Llegamos los consultores con nuestra metodología y nuestros efectos especiales, pero la realidad es que nos encontramos con redes pre-existentes, con historias que se han ido tejiendo a lo largo de años de convivencia corporativa. En este caso, algunos grupos habían alcanzado un nivel alto de productividad y mostraban resultados impactantes. Así que le primera píldora es la de respeto, tacto y humildad frente a estos sistemas.
Este es un aprendizaje también experimentado en el proyecto del Gobierno Vasco, dónde hemos tenido alguna reflexión al respecto con la gente de Consultoria Artesana en red.

Metodología
Sirve tan sólo para poner un poco de orden, para compatir la visión, construir un lenguaje común, ponerle nombre a cosas que siempre se han hecho y aprovechar los aprendizajes de otras experiencias para ahorrarnos problemas y aprovecharnos de las buenas prácticas. Hemos utilizado un pequeño “Documento de constitución” donde los distintos grupos tenían que decidir cosas como su organización interna, su plan de comunicación (tanto interno como externo –de la Cop-), los hitos que se marcaban y un plan de trabajo para abordarlos. Durante las jornadas presenciales (16 y 21 diciembre) se impartió formación en modelos Cops. Aquí algunos materiales utilizados:

Plataforma

El proyecto es un piloto, así que un requerimiento era no invertir en plataformas propietarias. Después de revisar algunas optamos por TEAMLAB. Muy sencillo pero con las funcionalidades básicas. La hemos configurado de forma que el programa común que integra a todas las Cops se encuentra en el espacio que en TEAMLAB se llama Comunidad, y luego cada cop trabaja de forma específica en los espacios para Proyectos. A nivel de Comunidad se comparte un blog, wikis, foros, gestor documental, eventos, y enlaces de interés. Los Proyectos sirven para gestionar hitos y tareas.


Kickoff

Las jornadas presenciales, han sido el meollo del asunto. Allí es dónde las cosas que necesitan “piel” han ocurrido.
Nos planteamos las jornadas en dos etapas. Una con los responsables de los grupos (30 personas) y la segunda, con todos los participantes del programa (130 personas). En ambas, dimos –en formatos distintos por razones de aforo y entorno- formación tanto en metodología como en el uso de la herramienta.

Pero las jornadas debían favorecer algo más que la mera exposición por nuestra parte. Para ello, en la primera jornada pedimos la participación de los responsables de los grupos, quienes a través de un “template” (unificador de dis
cursos), compartieron con sus compañeros, sus historias, objetivos, avances y próximos pasos.










Sirvió también esta jornada para avanzar en la creación de una red de redes y trabajar en compromisos e intercambios entre los distintos grupos.

















En la segunda jornada, repetimos el proceso ya con todos los participantes de los grupos. No hubieron esta vez presentaciones públicas de los participantes, pero sí trabajo de grupo (por grupos) para finalizar el “documento de constitución” que habían iniciado los responsables de los grupos durante la primera jornada.



Por la tarde, la gente de Andes Ventures, se encargó de hacer el resto. Las fotos (últimas) hablan por sí solas

Cómo siempre, estas cosas solo salen si se cumplen todas las condiciones de la siguiente lista:

  1. "Materia prima" de primera: Gente con ganas de hacer cosas, de emprender, de mejorar su realidad, de aprender y de compartir.
  2. Buen liderazgo interno. En este caso Elena Sanz como sponsor del programa DAVinci
  3. Buen equipo a ambos lados de la línea contractual: Ikuska Sanz (amasando voluntades), Ana Rodera (a los mandos de la plataforma), Marian Rios (moviendo todos los hilos), y una servidora (de marioneta agradecida).

Seguiremos enredando.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Managing XXI en Barcelona


Tras la experiencia en Chile, volvemos a editar la acción de formación Managing XXI, esta vez en Barcelona, para AGBAR.

A partir de ahí, abriremos el programa para que cualquier directivo/a de organizaciones públicas o privadas, pueda compartir con nosotros, un proceso de aprendizaje a cerca de cómo manejarse en este complejo momento socio-económico en el que estamos inmersos.
Esa experiencia, que vivimos ya con 150 directivos en Santiago de Chile, se nutre de contenidos sobre la sociedad red y la economía del conocimiento, contenidos que imparten diversas voces que van entrando en el aula a desarrollar sus saberes, sus investigaciones, sus experiencias, sus dudas... pero se nutre sobretodo del intercambio de ideas y propuestas… de los alumnos, entre ellos y con el equipo docente.

Encontrar las claves para la gestión y el liderazgo en este mundo y en estos momentos, requiere sobretodo sentido común, capacidad reflexiva, humildad, cierta perspectiva histórica y al menos, curiosidad por todo lo relacionado con Internet, lo digital y sus dinámicas socio-económicas.
Todo eso lo encontramos en las gentes de Santiago. Fue un regalo, en lo profesional y en lo personal. No diré que una sorpresa, pero sí una lección: Hay aún una tendencia a la mirada “eurocéntrica”, que choca con una realidad esperanzadora al otro lado del atlántico: personas bien formadas (sí, ya, las que han tenido acceso al conocimiento, lejos de las democráticas oportunidades en esta -aún- social Europa), ávidas de aprender (con más humildad que en la cínica Europa), con estructuras (empresariales, institucionales) quizás aún no tan solidificadas (como en la antigua Europa), con una cosmovisión del mundo envidiable

La semana que viene levantamos de nuevo el telón. No será lo mismo, sencillamente distinto. No cambia la ilusión con la que lo preparamos y nos enfrentamos al proyecto. No cambia el respeto por la audiencia y el comprimiso con sus expectativas. Cambia la logística del aula: la cercanía física permitirá la participación directa de colegas como Ismael, Janquim, Julen, JM Bolívar, Francesca, Ana y Miquel (que sí estuvo en la aventura andina), aunque no renunciaremos al material audiovisual que nos preparó Jon. No cambiará el enfoque: participativo, alineando el proyecto de compañía con ejercicios y debates adaptados a su realidad corporativa, con soporte online para la gestión de contenidos y la participación extra-aula.

Esto último nos permitirá (a ver cómo nos sale) conectar a los grupos de ex-alumnos de Chile con los de Barcelona en una única red global de intercambio de impresiones y materiales en relación a los temas tratados en el curso.

Son días locos estos previos, pero una sensación de robusta seguridad se impone gracias a un “equipo A” formado por Marian, Álvaro y Mónica. Sois la bomba! :)

Os dejo aquí el programa.

Seguiremos relatando en The Project y en la web de Managing XXI.


domingo, 7 de agosto de 2011

Managing XXI en Chile

Estamos ya en Santiago de Chile, preparados para empezar en un par de días una intensa agenda durante la que impartiremos varios módulos del programa Managing XXI a casi 200 directivos del grupo - AGBAR - andinas.

Como tantas compañías, organizaciones, instituciones…nuestro cliente se encuentra en un proceso de transformación hacia modelos de negocio más alineados con los nuevos contextos económicos. Operar en esta sociedad red, basada en el conocimiento, con nuevas reglas del juego en las relaciones que se dan tanto dentro como fuera de la empresa, y con una tecnología que irrumpe también en los entornos corporativos; parece fácil pensar que los líderes empresariales que han de manejarse con esta complejidad, deben revisar sus competencias, disponer de nuevas herramientas y renovar estrategias.

Venimos, con entusiasmo pero con humildad, con propuestas pero con prudencia, con ideas pero para debatirlas, con proyectos pero para dibujarlos entre todos. Venimos a compartir con estas gentes, la parte de la realidad que conocemos, con la esperanza de que combinada con sus saberes, lleguemos a puntos que ayuden al grupo andinas, a conseguir sus objetivos.

El próximo martes, a las 9h, hora local, Maria Elena Sanz responsable de la Gerencia Corporativa de Comunicaciones y Desarrollo Organizacional, abrirá las jornadas y explicará con una combinación exquisita de pasión y lucidez, cómo el Plan de Excelencia y Cambio cultural (Proyecto DaVinci) del Grupo Andinas, necesita, entre otras cosas, liderazgos inspiradores, compartidos, actualizados, sensibles a los cambios socio-económicos que vivimos, y dotados de la tecnología más idónea para su desempeño.

A partir de ahí, seguiremos Miquel Serra y una servidora, trabajando con 6 grupos de unas 30 personas, los distintos módulos del programa de formación. Llevamos tiempo afilando los lápices, pero es inevitable (supongo), cierta ansiedad por estar a la altura de las expectativas y las necesidades de las personas que vendrán a escucharnos. Haremos “our best” (me encanta esta expresión inglesa).

Mientras, nos acomodamos al clima, tanteamos la ciudad y compartimos reflexiones gracias a la calma que aporta la distancia (abrumadora por cierto) de otras obligaciones y otros momentos del año. Mientras, el equipo de producción desde Barcelona y Madrid, ultima detalles.

Siempre pensado que un buen indicador (de esos que nunca salen en las metodologías) de calidad de un proyecto es la cantidad de talento que pivota alrededor. Y en este es un lujo contar con un equipo formado por Álvaro Llosa (arquitecto de contenidos), Mónica Poza (diseñadora y esteticista), Marian Rios (inventora de juegos y dinámicas), Jon Saez (contador de historias audiovisuales) Ikuska Sanz (mrs. Wolf), han trabajado (y lo siguen haciendo) de una forma emocionante. Nayat, Karen, Rossana y Jimena (a quienes hemos puesto cara estos días), han coordinado acciones (hasta detalles imperceptibles) desde Chile para que todo esté a punto para la función.

Han colaborado también en la generación de contenidos y material audiovisual:

Pilar Conesa, que nos acompañará aquí en Chile la última semana de agosto,

Julen Iturbe-Ormaetxe, que poco antes de irse a pedalear la transpirenaica nos dejó grabadas un par de perlas.

David Sanchez Bote, que desde Donosti, nos enseña tantas cosas sobre empresa abierta.

Francesca Cañas, que ha movilizado al TooLAB, para hacer una compilación de herramientas aplicadas al trabajo en las organizaciones.

Sofía Kariakin, que nos ha hablado de escucha activa y márqueting on line.

Janquim que desde esa mirada analítica y apasionada nos regala una lúcida narración sobre el impacto de Internet en nuestra sociedad.

Como lo hace también Ismael Peña López, con una exposición más académica (en el mejor de los sentidos  investigadora, didáctica, sobre las dinámicas de la Sociedad Red.

Marta Continente, que nos recibió en el Citilab para hablar sobre el papel de la mujer en las organizaciones e instituciones, y de su experiencia al respecto como directora de equipos e impulsora del uso de las nuevas tecnologías en la administración y en su relación con la ciudadanía.

Antoni Gutiérrez Rubí, también nos habló, en una interesantísima entrevista sobre el liderazgo femenino y los esquemas sociales que condicionan su desarrollo.

Sylvia Taudien empresaria especializada en proyectos de cambio en las áreas de Recursos Humanos y orientación profesional, nos habló también sobre el estado del arte de la mujer en la alta dirección empresarial.

Xavier Gabarró, que nos ha ayudado a desarrollar, desde la perspectiva que da su formación en filosofía y antropología, miradas sobre la condición humana, sea cual sea el estadio tecnológico en el que se encuentre.

Mil gracias a todas y que empiece el show!





lunes, 4 de julio de 2011

Riding with the Horsewoman


La semana pasada tuve que dar una conferencia ante un público que provenía de diversos países de Europa. El tema, conocido: “Enterprise Social Netwoks”, el material: reaprovechado de otras ocasiones, el problema: hablar durante 40 minutos en un inglés compresible, y participar en un debate final respondiendo a las preguntas y propuestas que pudieran ocurrírsele a cualquiera de los 200 invitados al evento. Además, la organización nos requería una dramatización entre mi “partenaire” y yo. Él debía defender el lado oscuro: los riesgos y los problemas de Internet y yo sus bonanzas y aplicación a la vida personal y profesional. Una especie de dúo Pimpinela a la francesa (el cliente era GdfSuez).

Mi primera respuesta fue que mi nivel de inglés no daba para tanto, pero finalmente y tras una serie de acontecimientos que no vienen al caso, acabé allí subida sonriendo a una audiencia dispuesta a escuchar.

Lo que ocurrió durante el mes previo a la conferencia, fue que topé con una de esas profesionales con quien vives una experiencia digna de ser compartida

A Paquita me la recomendó un colega. Ella le da clases de inglés y yo necesitaba a alguien que rescatara esa lengua de mi subconsciente más profundo y me pusiera las pilas en 4 semanas. Pero Paquita es algo más que una profesora de inglés. Tuve la sensación desde el primer café, que estaba conceptualizando un proyecto con mi situación. Me hizo tantas preguntas que no tenían que ver con el discurso propiamente dicho, que al inicio sentí cierto desconcierto, pero me dejé llevar. Y en cuanto dibujó el "proyecto MJ", fue como subir con ella a un caballo al galope.

Me ayudó con el idioma, pero durante todas las sesiones que trabajó conmigo, casi parecía lo secundario. Me explicó cómo hablar con el cuerpo, cómo respirar, cómo modular, como interpretar a la audiencia, como interpelarla. Identificó tics irritantes, y construcciones favorecedoras. Me ayudó a visualizar el momento, me grabó, me enseñó, me reconoció y me mostró, me entrenó. Me ayudó a conocerme un poco más a mi misma y a ganar confianza. El inglés se convirtió en un vehículo a través del cual esa mujer iba construyendo un andamio a mi medida, ni muy alto ni muy bajo, sobre el que poder moverme con libertad y confianza el día de la presentación. Ella, que es una experta amazona (sentido literal), domó mis inseguridades y virtudes, hasta sacar de mí algo realmente asombroso.

A veces, encuentras personas así. Y vale la pena contarlo.

Francisca Picar es licenciada en filología anglogermánica, cursó estudios de derecho, de especialización en coaching ejecutivo y de liderazgo, a lo que se dedica recientemente después de una larga trayectoria profesional repartida entre la docencia(inglés, francés, catalán y castellano, italiano, árabe), traducción e interpretación.
Ha estado muchos años vinculada a la acción social, como concejal de salud pública y servicios sociales en su localidad, y como presidenta de varias asociaciones sobre la defensa y promoción de la mujer (creó uno de los primeros equipos interdisciplinario de atención primaria a la mujer víctima de violencia doméstica). Entre muchas otras cosas, lidera un proyecto que persigue la implantación en España de la disciplina deportiva de la hípica adaptada, y de promoción paralímpica de sus deportistas.

Y a ratos, ayuda a que algunos humanos no nos descalabremos con nuestras neuras.

Os dejo aquí la presentación, por si le sirve a alguien en trances parecidos

domingo, 29 de mayo de 2011

The Project - La web

Este pasado jueves a las 19:30 se activó la web de The Project y lo convertimos en excusa para conocernos y reconocernos, unas cuantas personas que colaboramos en proyectos y otros derivados.

Le hemos puesto un cuerpo a muchas ideas. Le damos un espacio común a los proyectos y a las personas que trabajamos en ellos. No es una web empresarial, ni corporativa, no representa a nadie, ni es el lugar oficial de nada, no es un lugar para promociones autocomplacientes, ni para apologías de marca.
Es, digámoslo así, un Hub de conocimiento, aquel que somos capaces de generar en el curso de los trabajos que realizamos. Ese conocimiento pertenece a las personas que lo producen, lo publican y lo comparten con la generosidad y la convicción de que liberarlo es la mejor forma de generar más valor para todas.


Obviamente, eso da visibilidad y retorno en forma de atención y reconocimiento, cosa que también perseguimos, para tener más oportunidades de trabajar en lo que nos gusta y con quien nos gusta.

La web tiene cuatro espacios principales:
  1. El blog general que hará las veces de linea editorial de la web, y dónde se publicarán artículos relacionados con la sociedad red y los cambios económicos, sociales y políticos que estamos viviendo.
  2. El apartado de proyectos, dónde se publicará el conocimiento generado en cada trabajo, a través de un blog específico, enlaces relacionados, personas involucaradas y los documentos que sea posible liberar.
  3. El apartado de laboratorios, que son espacios de divulgación sobre algún tema de interés para la red o para mostrar prototipos de proyectos, productos o iniciativas empresariales, o para la organización de ThinkTanks en torno a un ámbito de investigación.
  4. Información sobre las personas que están trabajando en los proyectos que recoge la web.

Os invitamos a pasearos por allí, y esperamos que lo que encontréis os sea de utilidad e inspiración. Agradecemos cualquier sugerencia de mejora y propuestas (mejor allí) y seguiremos trabajando en mejorar la plataforma, depurar errores y ampliar funcionalidad.

Quiero das las gracias públicamente a la gente que ha desarrollado la web. Han hecho un trabajo técnico excelente, pero han hecho algo más: han sabido recuperar una situación que se puso crítica hace un par de semanas por problemas que no vienen a cuenta, con el anterior proveedor. La gente de Metadrop con Paco Montes al frente, se hizo cargo de todo y con compromiso y responsabilidad nos han preparado en tiempo record esta casa que estrenamos.

Mi sombrero y mi agradecimiento.

domingo, 22 de mayo de 2011

The Project

Hace casi dos años y medio que me dedico a la consultoría como profesional independiente. Desde el primer año ya entendí que esto va de redes. El segundo las conexiones empezaron a cristalizar y en este tercero, abro la persiana!.


Nace The Project, bueno, no nace exactamente, pero sí la vestimos de fiesta y la presentamos en sociedad. Lo que encontraréis allí es la materialización de una filosofía de trabajo y de una forma de entender las relaciones profesionales, en la que muchos creemos y reivindicamos desde distintos puntos de esta red que nos permite ser, como nunca antes había sido posible, emancipados propietarios de nuestras herramientas de producción.

Existen muchos tipos de redes que persiguen objetivos diversos: la socialización, el intercambio de conocimiento, la promoción de unos valores comunes (causas). The Project es una empresa nodal cuyo objetivo principal es la realización de Proyectos.
  • Canalizar demanda que por tiempo o competencias no podemos asumir.
  • Poder ofrecer a nuestros clientes mejor soporte, al contar con otros colegas que complementan nuestra oferta.
  • Intercambiar conocimiento y buenas prácticas.
  • Identificar oportunidades de trabajo interesantes para otros, sabiendo que otros también piensan en ti cuando aparece algo que compartir o traspasar
  • Poder ofrecer ayuda a gente joven (o re-joven), que empieza (o se recicla) y que no quiere irse a una empresa tradicional, pero que tampoco tiene una red consolidada para ejercer su profesión por libre.
  • Jugar a todo: a veces a la individualidad, a veces a la marca colectiva, que pueda agregar capacidad comercial a la hora de aspirar a proyectos de cierta envergadura o complejidad.
  • Asociarse para acceder a proyectos directamente, sin complejos ni intermediarios.
  • Rodearse de los mejores, esos que tarde o temprano se buscan la vida y están por ahí fuera y que no hay estructura que los retenga.
  • Aprovechar la diversidad que permite la red: Invitando, mezclando, combinando disciplinas de lo más dispares, de lo más necesarias tantas veces en los proyectos!.
  • Montar, en definitiva, equipos especiales para proyectos únicos, en formato "Empresa a lo Hollywood"
...Y por supuesto, aprender y disfrutar en cada trabajo.

No todo está resuelto, ni es una apuesta sencilla, está casi todo por definir, pero la tendencia es clara y el modelo una alternativa viable. Hay mucha gente investigando sobre nuevos modelos de organización productiva más acordes con la sociedad Red del s.XXI: Los estudios sobre Empresa abierta, la P2P Foundation, o la misma declaración de Consultoria artesana, son ejemplo de que algo se mueve, a veces a velocidad de vértigo, hacia cambios en las forma en que nos organizamos para producir, aprender y relacionarnos.


The Project es ya algo más que una declaración de intenciones, así que va siendo hora de mostrarlo y compartir dudas, errores, éxitos y tanta información como sea posible de las experiencias vividas en los distintos proyectos.


Este jueves día 26 de Mayo, lanzamos un espacio web (si los cables no nos fallan) dónde poder integrar toda esa experiencia y ofrecer un lugar a aquel que quiera visitar nuestro taller, nuestra boutique, nuestro garaje, nuestra oficina o como quiera cada uno considerar ese lugar común y espero agradable, que estamos preparando con gran ilusión.


Seguiremos contando.

Os dejo un adelanto del ambiente vivido en los preparativos (produced by @ikuska):


Toma 1 - Making Of ThP Web from The Project on Vimeo.

sábado, 14 de mayo de 2011

Clientes-Socios de Conocimiento

Esta semana Maria Salamero responsable de Gestión de Conocimiento del grupo AGBAR, explicaba en el CEJFE el proyecto del mismo nombre en el que AGBAR se embarcó hace dos años, cuando me invitaron a colaborar con ellos, justo recién creada el área que dirige Salamero, para dibujar la hoja de ruta de lo que sería un ambicioso plan de transformación de la compañía con el conocimiento como eje central del cambio.

Durante estos dos años se han ido implantando una serie de iniciativas (entornos de trabajo colaborativo, plataformas tecnológicas, desarrollo de nuevos liderazgos, formación en habilidades digitales…) que Maria Salamero explicó con el rigor con que una directiva de verdad puede explicar un proyecto de verdad, concebido para ser funcionalmente útil y no estéticamente atractivo.


Es una de las cosas que más le agradezco a esta experiencia, es que sea un proyecto de verdad , algo que depende tanto de los profesionales como de los clientes que los co-crean e implantan.


Ocurre con este tipo de proyectos, y es de esto de lo que quería hablar que la relación cliente-proveedor mantiene sus rigores mercantiles, pero se matiza cuando empieza el intercambio de ideas y conocimiento en la creación conjunta de un proyecto dónde se invierte algo más que dinero (en el caso del cliente) y horas (en el caso del proveedor). El proyecto, en realidad sería otro distinto si no estuviéramos participando en él las personas que lo hacemos. No las empresas, si no las personas con nombre y apellido que han ido aportando su grano de arena a cada una de las líneas de trabajo del proyecto. Esto puede parecer obvio, pero no es trivial, porque más allá de los portfolios de servicios, de las ofertas más o menos empaquetadas, de las culturas de las empresas, de las supuestas metodologías, al final, el proyecto va a parecerse a las personas involucradas en él, esa es la pura, alarmante y fascinante realidad que constato una y otra vez.


Recuerdo que muy al principio, en una reunión de explicación del proyecto a un grupo de directivos de AGBAR, alguien me preguntó : ¿Cuántas veces has implantado este proyecto?, le contesté la verdad: nunca. Me fui a casa preocupada por si mi respuesta podía hacer que perdiera un proyecto que obviamente deseaba intensamente hacer.


Hoy sé que si cualquier otra compañía, aunque muy parecida a AGBAR y con las mismas necesidades me planteara los mismos retos y me preguntaran, ¿Cuántas veces has implantado este proyecto?, seguiría respondiendo (quizás con algo más de seguridad) nunca.


Me gusta pensar (me ayuda a trabajar) que en estos casos no tengo clientes si no socios de conocimiento. Personas que aportan recursos, para que los profesionales aportemos otros y juntos co-diseñar proyectos e implantarlos en sus empresas. En realidad son redes inter-empresariales con estos socios-clientes para co-crear estrategias y aplicar soluciones.


Por resumir, el conocimiento no se compra ni se vende, se comparte para generar valor y cada uno (cliente y proveedor) aporta los recursos que tiene para hacer viable un proyecto
que difícilmente volverá a repetirse.

viernes, 22 de abril de 2011

El camino de los Generalistas

La configuración de nuestra identidad profesional se va desarrollando a medida que transitamos equipos, proyectos, empresas... Venimos con el bagaje unificador y siempre insuficiente de los estudios cursados, pero es luego, al hacer uso de nuestras habilidades técnicas y emocionales para aplicar ese saber teórico a las diversas situaciones que nos encontramos, cuando vamos definiendo nuestro Yo en los entornos profesionales.


Pero hay quien lo tiene más fácil y hay quien lo tiene más difícil. Y no hablo de dificultades laborales, si no de la dificultad de “encajar” dependiendo de cómo se hayan diseñado y desarrollado nuestras competencias.

El camino no está igual de claro para todos.


Los generalistas tardan más en entender quien son y qué son para lo demás y para sí mismos. Es una cuestión de complejidad: demasiadas opciones, demasiada diversidad, demasiadas conexiones. Quien puede hacerlo todo es fácil que acabe no haciendo nada (son puntos opuestos de un mismo círculo).

Es mucho más fácil (en este sentido) para aquel que se especializa en un tema concreto y disfruta profundizando en una práctica que tiene los límites conceptuales más o menos acotados.


En las empresas, en los equipos, necesitamos generalistas y especialistas, pero pienso que son los primeros los que requieren más atención. Son imprescindibles y son los que más sufren más hasta que definen esa identidad profesional que les dará la seguridad necesaria para desenvolverse en los equipos y los proyectos.


Un generalista contribuye de manera más indirecta a los procesos de producción. Es alguien que difícilmente vivirá las satisfacción intelectual que supone dar una respuesta técnica efectiva a un problema concreto, que difícilmente podrá definir los límites de su responsabilidad en un proyecto, su ámbito de actuación y competencia. Son los que se quedan pensando antes de responder al “y tú quien eres?”


Los generalistas salen de las carreras académicas con una mente bien configurada para la reflexión, el análisis crítico, el criterio, la abstracción y la conceptualización, pero tardarán tiempo (un tiempo siempre angustiante) en sentirse útiles. Ese sentimiento del que ve cómo su conocimiento aplicado genera valor.


Siempre sabrán un poco de mucho y nada del todo. Sus inquietudes son dispersas, beben de muchas fuentes y se apasionan por todo lo que encuentran por el camino. Sueñan con vidas paralelas y dudarán de por vida sobre su verdadera vocación. Poco a poco entenderán que pueden hacer casi de todo, pero nunca solos, necesitarán siempre a los especialistas a esos que admiran por la profunda verticalidad de su conocimiento


Yo admiro a ambos, mi formación es una ingeniería, pero mi mente es generalista. No sé si eso ha sido una ventaja. He intentado convertirlo en algo positivo, pero no siempre ha sido fácil. Por eso, reconozco y siento como propia la desazón de los que navegan aguas turbias. Ricas y llenas de nutrientes, pero turbias.


Es difícil dar consejos porque la trayectoria vital es personal e intransferible, pero hay algo que me parece útil al mirar con perspectiva el camino recorrido: no dejar que la ausencia de definición nos paralice; que el hecho de no tener el futuro perfilado no nos impida entregarnos al presente, que el no poder definirnos no nos impida actuar con la incisión de quien lo tiene claro. En definitiva, no habrá nada que defina el futuro y a nosotros en él, tanto como la vivencia intensa de los sucesivos presentes a los que nos entreguemos.


Feliz viaje!

sábado, 9 de abril de 2011

Comunidades de Práctica y Equipos de Innovación en el Gobierno Vasco

Hace unas semanas tuvo lugar el inicio y la presentación de uno de esos proyectos por los que vale la pena dedicarse a esto de la consultoria.

Todos los proyectos son importantes y todos los clientes igual de respetables, pero a veces se dan tantas condiciones favorables para la creación de un buen ambiente, el compromiso personal con un reto y la complicidad entre un equipo, que sencillamente, da gusto.

En el Gobierno Vasco llevan tiempo pisando fuerte para tranformar la Administración tanto en sus procesos internos como en su relación con el ciudadano, según los ejes que definen su Plan de Innovación Pública (PIP):

  1. Administración abierta e innovadora. Principios del gobierno abierto: transparencia, participación y colaboración
  2. Pleno desarrollo de la Administración electrónica. Un mandato legal y una apuesta de futuro.
  3. Eficiencia, más por menos. Una Administración más eficiente: que funcione mejor y cueste menos.

Podéis ver la presentación PIP en este post y seguir su desarrollo en el blog al que pertenece.


Es en este marco dónde se plantea el proyecto de Diseño e implantación de un programa de Comunidades de Práctica y Equipos de Innovación en el Gobierno Vasco.

El proyecto se presentó el pasado 23 de marzo en el salón de actos de Lakua II, en Vitoria. Podéis ver la crónica que Julen Iturbe, el "componedor" del equipo de trabajo que daremos forma al programa, hizo hace unos días en el blog del PIP.

Desde entonces, una banda formada por Iñaki Ortiz, Alorza, Jose Ramón Guinea, Juan Luis Ronco, David Sánchez Bote, Jon Sáez, Naiara Pérez de Villarreal, Ikuska Sanz, Amalio Rey, Odilas y Julen Iturbe-Ormaetxe vamos afinando los instrumentos y trabajando para poder ofrecer a todas las persona involucradas en el plan, el concierto que se merecen.

Pero no haremos nada bueno y útil si no abrimos bien las orejas y escuchamos a todo el que pueda aportarnos algo. Hay muchos canales para esta conversación. Uno de los más activos es el grupo de Linkedin, dónde Naiara coordina las "discusiones" que se dan sobre el PIP en general y sobre este proyecto en particular y dónde David ha publicado dos artículos, uno sobre las bondades y otros sobre las barreras de estos sistemas que queremos abordar.
Así que como dice Juan Luis, esperamos muchas gotas para construir olas (mala metáfora en estos días, me temo) que hagan mares.



Os dejo aquí, aunque ya está publicado en los distintos espacios que he ido referenciando, el video de Juan Luis Ronco, precioso, sobre la presentación que hicimos.
Gracias JL!





y si le tenéis muchas ganas al tema en Irekia, está la película en versión completa.

Seguiremos contando.

lunes, 14 de marzo de 2011

Talent on Air

Hace días, hablando con un colega sobre su salida de una empresa y su futura relación profesional con la misma, cristalizó una imagen que ya hace tiempo que se intuye y que se repite una y otra vez en muchas situaciones que vivo últimamente.

“Las empresas, para crecer, tendrán que hacerse más pequeñas”.

Nada nuevo, pero lo que parece que está cambiando es la decisión de lo que queda dentro y de lo que queda fuera, en esa dieta para perder el volumen inadecuado a los tiempos que corren.


La lógica parece decir que te quedes con el “core de negocio” y externalices lo superfluo, lo accesorio, los procesos “commodity”. Las políticas de outsourcing, offshoring ..etc de los últimos años respondían a esta lógica. Te quedas con el talento, externalizas “mano de obra”.


Creo que ahora ocurre al revés:
El talento resiste cada vez menos el corsé de las empresas. Los buenos se van. Han descubierto que solos, organizándose con otros de forma temporal, ya no necesitan a la empresa para ganarse la vida, ni siquiera para conseguir posicionamiento e incluso relevancia en un determinado mercado.
Es más, conozco cada vez más casos de gente que “florece” precisamente cuando sale del paraguas empresarial. De clientes que se acercan a ellos ahora que saben que la relación va a ser más directa con el profesional al que valoran y quieren contratar, seguros de que colaborarán con la persona y de que pagarán exactamente por quien es, por lo que hace y por cómo lo hace. Profesionales con identidad propia, más allá de marcas comerciales basadas en valores abstractos.


El talento se escapa de las organizaciones precisamente cuando estas más necesitan reformular su oferta y acelerar los procesos de innovación.

Pero en realidad no se van. No es como antes. No se van a otra empresa para favorecer a la competencia (aaahh o conmigo o contra mi!).

Sencillamente, se van y se quedan como agentes libres, "flotando en el aire", con una capacidad de conectividad (también con la empresa que dejaron!) impensable desde dentro de los muros corporativos; con una capacidad de generar conocimiento y valor difícilmente financiable por las estructuras de costes cortoplacistas tan habituales en nuestro ecosistema empresarial. Están ahí, asumiendo riesgos (tan necesarios para la innovación) que no se toleran en las organizaciones tradicionales.
Están ahí, en definitiva para devolver (si el sistema es hábil y reacciona), mucho más valor del que les exprimía por una nómina.


Son los nuevos departamentos (externalizados) de I+D.


Se invierte la pirámide de la gestión del talento: Se externalizará aquello valioso, y desde la empresa se gestionarán Redes externas de innovación que "enchufen" propuestas a las estructuras rígidas que las penalizaban. Y se mantendrá en nómina aquellos profesionales cuyo ciclo de renovación del conocimiento sea más lento, más estable, más estándar.


Habrá que trabajar sobre las nuevas reglas del juego, porque las relaciones de interdependencia están cambiando.

El caso es que deberías indentificar talento dentro de tu empresa, y cuando lo encuentres..."despídelo".

miércoles, 2 de marzo de 2011

Smart Companies

La semana pasada, participé en una jornada sobre Smart Cities organizada por el Club de Marketing Barcelona y dirigida por Pilar Conesa, Directora de Anteverti y una eminencia, por su trayectoria profesional y su compromiso personal, en estrategias del desarrollo urbano eficiente y sostenible.

Pilar abrió la mesa con un recorrido conceptual sobre las distintitas dimensiones de una Smart City (“Citizen Engagement”, Calidad de vida, Sostenibilidad económica, Sostenibilidad medioambiental, Empresas “inteligentes”), y cerró la jornada proponiendo a la sala, algunas líneas de desarrollo de negocio vinculado a esta tendencia.

Durante la mañana compartí presentaciones con Irene Compte, Directora adjunta de Urbiótica y Joan Batlle, Cap de cooperació internacional en innovació i eAdministració de l'Ajuntament de Barcelona, que desde distintas perspectivas desgranaban los conceptos propuestos al inicio por Pilar Conesa.

Yo hablé de empresas (o de organizaciones, mejor) y de su relación con el entorno (ciudades en este caso). Si los modelos de relación productiva han cambiado, parece lógico pensar que nuestras cuidades deberían redefinir infraestructuras y servicios para los nuevos “Knowledge workers”. Y en sentido opuesto, si hablamos de Smart Cities parece también lógico pensar que necesitamos Smart Companies: Organizaciones que operan en una nueva economía global, digital e informacional, en una Sociedad Red.

Las ciudades, su configuración y estructura están fuertemente relacionadas con la forma de organizarnos en torno a la producción, especialmente a la producción masiva desde la expansión de la revolución industrial.

La concentración en ciudades, permitía una densidad de mano de obra, imprescindible para la producción en masa. El sistema fabril, se basaba en la división del trabajo y la especialización por funciones, dónde las personas era un recurso más de producción, energía productiva para la creación de riqueza.

Poco a poco fuimos pasando de una sociedad agraria y rural a una sociedad industrial y urbana. Diversos factores contribuyeron al éxodo a las ciudades, pero de forma incuestionable, una determinante demanda de mano de obra de la industria.

En pleno 2011, nos vemos repensando nuestros modelos urbanos , como en pleno s.XXI nos vemos también, rediseñando nuestros modelos de producción.

Hemos cambiado de era para entrar de pleno en una economía basada en el conocimiento, que opera a escala global, y que dispone de tecnología que permite que la principal materia prima de producción (la infomación) fluya de forma instantánea a coste despreciable.

Todo esto significa que el condicionante físico, requerimiento para la densidad de mano de obra, tiende a desaparecer. O dicho de otra manera, que las asociaciones que permiten la colaboración productiva ocurren (también) en otra dimensión: la digital, libre de las restricciones espacio-tiempo. El nuevo modelo de organización productiva tiene forma de RED.

Todo esto significa que hoy y cada vez más, los trabajadores son propietarios de sus herramientas de producción (conocimiento) y que serán ellas (las personas) las que deciden como usarlas y con quien.

Esto significa que las Empresas del s.XXI han de entender que la posición de privilegio que les otorgaba ser las únicas estructuras capaces de producir de forma eficiente, ha desaparecido.

Esto significa que en la sociedad del conocimiento, las empresas deben basar su actividad económica en gestionar muy bien la información de que disponen, dejar que las personas la conviertan en conocimiento, y asegurarse de no obstaculizar ningún flujo que fomente el aprendizaje continuo y la innovación.

Y sobretodo entender una ecuación paradójica y es que para ser más grandes, deberán ser más pequeñas: En una economía donde la velocidad de cambio es vertiginosa, la obsolescencia de productos y servicios tiránica, las crisis espasmódicas y la diversidad (de perfiles y competencias para la producción) inmanejable, supongo que nos queda ganar en flexibilidad, hacer las estructuras porosas y diseñar mecanismos de relación con redes externas.

No tengo ni idea de lo que es una Smart Company, pero si pienso en las empresas como entes vivos superando los retos de la selección natural, imagino entornos dónde ocurran cosas que he intentado reflejar en este esquema conceptual.









Por resumir en una estética lista de 10 puntos, para mí, una Smart Company...

  1. Desarrolla su actividad económica en torno al conocimiento
  2. Hace un uso intensivo de las tecnologías
  3. Opera a escala global
  4. Gesiona modelos de organización en RED al servicio de proyectos
  5. Promueve liderazgos basado en la gestión del talento
  6. Integra a las nuevas generaciones
  7. Sensible a su entorno: Identifica Redes externas de colaboración
  8. Establece conversaciones con sus mercados
  9. VA más allá de la RSC: Eficiente y sostenibl
  10. Allí donde las personas hacen lo que quieren y contribuyen con ello al proyecto empresarial
os dejo aquí la presentación. Supongo que en breve publicarán la de mis compañeros en la web del evento.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Comunidades para la Economía abierta

Mi contribución a la jornada de Economía abierta que organizaban Consultoria Artesana en REd, alojada Eutokia y conducida por los maestros Julen y David, trataba de Comunidades de Práctica, o de forma más genérica de redes de conocimiento y trabajo colaborativo.

Todas estas definiciones responden con distintos matices, a modelos de organización basados la motivación personal para colaborar con otros con quien tienes un objetivo común.


En el modelo de Economía abierta desarrollado en el estudio sobre Economía Abierta de la EOI, se hacen continuas referencias a la persona como eje central sobre el que gira toda actividad económica basada en el conocimiento. Esta dimensión humana, junto la adquisión de la tecnologia adecuada, y a la constatación de que la colaboración es un “buen negocio” si se enfoca bien y se generan las condiciones óptimas para ello, hace que los modelos de Comunidades de Práctica, en cualquiera de sus variables metodológicas, sea (así lo entendí al ponerme a preparar la presentación) un elemento bien encajado en el mapa conceptual de la Economía Abierta.


Más allá del relato, me gustaría recuperar algunas ideas clave subyacentes en la presentación:


1. Comunidades...grupos de personas que colaboraban en desarrollar, intercambiar, proteger o difundir conocimiento han existido desde el origen de los tiempos. Maticemos pues el factor tecnología que más que hacerlo posible, lo facilita, potencia y multiplica. Lo hace masivo y dimensiona los resultados de una forma impensable hace tan sólo unos pocos años.


2. Las capacidades de co-crear, colaborar productivamente, de generar acción colectiva están implícitas en todo grupo, pero es necesario crear las condiciones para que ello ocurra. Diseñar los mecanismos de relación y participación, de agregación de nuevos miembros, de gobierno, de gestión de la información, de medición de resultados...favorece el trabajo de los grupos, a veces, excesivamente confiados a la entropía.


3. Cuando hablamos de Comunidades virtuales, la plataforma tecnológica, el espacio virtual donde se da buena parte de la relación entre los miembros, ha de responder al tipo de Comunidad y a los objetivos que persigue. No es lo mismo si perseguimos comunicarnos y socializar que crear algo de forma conjunta, que difundir un contenido...las funcionalidades de la plataforma han de adaptarse a las necesidades de los usuarios (una obviedad, pero conviene decir que no todo sirve para todo).


4. En clave ya organizativa (empresarial), las Comunidades pueden favorecer la creación de espacios que pongan a la persona en el centro de la actividad. Estas redes pueden diseñarse en clave interna para favorecer la gestión del conocimiento, pueden facilitar también la relación de las organizaciones con su entorno (otras estructuras con las que intercambiar conocimiento o abordar proyectos de forma conjunta) y por último permiten dotar de cierta estructura a redes totalmente libres, distribuidas, formadas por nodos-persona que se asociantemporalmente en torno a un objetivo común.


Os recomiendo echar un vistazo al resto de ponencias Aitor Otxoa, Amalio A. Rey, Ricardo Antón, María ptqk, Genís Roca, Iván Marcos Peláez y Yuri Noda y a todo el material que los organizadores están volcando en la web del evento.